¿EN QUÉ CONSISTE EL TRATAMIENTO DE IMPLANTES DENTALES?
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La opción más segura para sustituir unos dientes perdidos son los implantes dentales. En Quezalba se realizan con materiales 100 % biocompatibles que favorecen una integración completa con el hueso.
Un implante es un tornillo de titanio que se introduce en el hueso maxilar, sobre el cual se colocarán posteriormente coronas o prótesis que sustituyen en aspecto y funcionalidad al diente perdido.
- Masticar correctamente.
- Recuperar la autoestima.
- Mejorar la digestión, al masticar los alimentos de manera adecuada.
- Hablar y pronunciar sin dificultades, la lengua podrá moverse de manera natural.
- Recuperar la funcionalidad completa de la boca al tener todas las piezas dentales.
- Reemplazo de dientes únicos, Se trata de colocar un implante de titanio intraóseo donde se ubicaba la pieza perdida. Después se coloca sobre el implante una corona de porcelana de alta resistencia.
- Reemplazo de varios dientes; si se han perdido varias piezas dentales, lo más recomendable es colocar un puente sobre implante. A tal fin se colocan en los maxilares varios implantes que sustituyen las raíces dentales. Sobre ellas se fijan las piezas dentales fabricadas en porcelana, lo cual mejora ostensiblemente la salud oral y la apariencia.
- Rehabilitación de maxilar completa, si se ha perdido la dentadura por completo la mejor opción es colocar varios implantes. Sobre ellos se instala una dentadura elaborada en metal y porcelana, que se asemeja a la natural.
- Implantes dentales de Carga Inmediata. Los implantes de carga inmediata son aquellos en los que se coloca la prótesis (una corona fija provisional) en un período de tiempo no mayor a 24 horas desde que se colocó el implante. De esta forma, se permite restaurar las piezas perdidas del paciente desde el inicio, conservando la estética de la encía de alrededor de los implantes y sin la necesidad de esperar de 3 a 6 meses como en la rehabilitación diferida.
Según el material del que están formadas hay dos tipos:
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- Corona de metal-porcelana: Interior de metal, cubierto de porcelana que imita el diente natural. Poca translucidez debido a su núcleo.
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- Corona de zirconio: Se compone de zirconio en su totalidad, 100 % biocompatible. Ofrece un resultado más estético (son translúcidos), se asemeja al resto de los dientes naturales.
Los implantes dentales tienen una vida media de entre 15 a 25 años. El implante es permanente, ya que el titanio (material de los implantes) se fusiona con el hueso maxilar en un proceso llamado osteointegración, y dura todo el tiempo que el hueso de la mandíbula esté allí, a menudo durante el resto de la vida del paciente, suponiendo que exista un mantenimiento adecuado y que el paciente reciba revisiones dentales periódicas dos veces al año.
La corona dental tiene una vida más corta que un implante, con una duración aproximada de 10 a 15 años antes de que el desgaste normal pueda hacer que el diente requiera reemplazo, aunque una excelente higiene dental podría extender la vida útil de una corona dental más allá de los 15 años.