¿Qué es una fisura dental?
Las fisuras dentales son pequeñas grietas que aparecen en la superficie del diente sobre la cara lateral del molar o de la pieza dental en cuestión.
Suelen presentarse en forma de diminutos agujeros que resultan casi imperceptibles de identificar, tanto para el paciente como para el odontólogo. Por ello, es necesario una radiografía dental para precisar su diagnóstico y localización.
Se debe de tener en cuenta que la edad es un factor importante, una gran mayoría de los pacientes que acuden a consulta con grietas en los dientes superan los 50 años. Esto no quita que pueda ocurrir en personas más jóvenes.
Causas de LAS FISURAS DENTALES.
Tienden a producirse por diversos motivos:
- En dientes sanos, las fisuras pueden aparecer al realizar actividades como masticar hielo, caramelos, turrones duros u otros alimentos de un grado alto de dureza.
- Por traumatismos dentales. Un golpe en la boca por accidente, lesión deportiva o caída
- Rechinar y/o apretar los dientes de forma habitual, aumenta el riesgo de desgastar la superficie del diente, haciendo la pieza más vulnerable a las fisuras.
- Los cambios bruscos de temperatura en alimentos de forma frecuente.
¿Cuáles son los síntomas de una fisura dental?
Sufrir una fisura no siempre es sinónimo de padecer un terrible dolor. Los síntomas en cualquier caso, variarán en función del grado, la profundidad y el tamaño de la fisura.
Los signos más frecuentes suelen ser:
- Aumento de la sensibilidad dental.
- Dolor de encías.
- Calambres o liberación de la presión al masticar.
- Dolores súbitos.
En el caso de que el diente esté roto, dolerá debido a la presión ejercida al masticar, haciendo que la grieta se abra. Cuando la masticación se detiene, se libera la presión y la grieta se cierra rápidamente, lo que provoca otro dolor agudo.
Tipos de fisura dental.
En cuanto a los tipos de fisura dental, nos podemos encontrar con dos tipos:
Fisuras dentales superficiales: solo afectan al esmalte, no provocan dolor y no suponen ningún problema real por lo que no precisan de tratamiento.
Fisuras dentales profundas: afectan más allá de la capa externa del diente y se adentran en la dentina, este tipo sí que puede producir dolor intenso. Si el nervio estuviese afectado como consecuencia de la grieta, requerirá realizar una endodoncia para poder salvar el diente. Sin embargo, si la grieta llega hasta la línea de las encías, es probable que sea necesario realizar una extracción dental.
Tratamiento de una fisura dental.
La elección del tratamiento dependerá de los siguientes factores:
- Donde se encuentra la fisura.
- El tipo de fisura.
Dependiendo de esto factores, el odontólogo podrá recomendar soluciones como el sellado mediante una resina plástica para rellenar la grieta, o el tratamiento endodóntico si la grieta se extiende hacia la pulpa.
Por eso, detectarlas y tratarlas a tiempo, es un factor fundamental para salvaguardar nuestras piezas dentales.
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